sábado, 13 de octubre de 2012

Vaya par de Gemelas: De viajes, firmas y planes va la cosa...





De viajes, firmas y planes va la cosa...







¿Dni?
Sí.
¿Cartera?
Sí.
¿Billetes?
Sí.
¿Neceser?
―Depende.
―¿Cómo que depende?
―Eso es muy relativo; llevo dos, así que especifica.
―Joer, morena... a ver: ¿Neceser con cepillo de dientes, dentífrico e hilo dental?
―Sí.
―¿Neceser con maquillaje y potingues?
―Sí... ¡Espera! Llevo tres... ¿qué coño tengo en esta?
―Joder, así no llegamos, nena…
―Vale, perdona, rubia. Sigue, por favor.
―Vale: ¿Neceser azul que a saber qué tendrá dentro?
―Sí.
―¿Qué tienes ahí por cierto?
―Nada que importe hasta el viernes que viene.
―Ya… lo dejaré a un lado porque tengo prisa… ¿Conjuntos de ropa interior, dos, uno blanco y uno negro?
―Sí y no.
―Joer, Jean, ¡no salimos hoy!
―Pero no te me cabrees, rubia... andaaaa, no pongas morritos. Que sí, OK para la ropa interior, aunque, sobre mi respuesta anterior, sí que llevo dos conjuntos, pero los dos son negros.
―No pienso prestarte el sujetador blanco, morena, que ya nos conocemos.
―Tomo nota, y sigue que se nos echa la hora encima.
―A ver, por dónde iba... ah, sí: ¿Pantalón vaquero, pitillo negro, camisa, camiseta, dos pares de calcetines y fular de colores varios para que pegue bien con cualquiera de las opciones anteriores?
―Sí... y no.
―¡Yo paso, morena! Haz tú el recuento de maletas si quieres...
―Pero déjame terminar, rubia; decía, que sí a la ropa, toda ella, y no, no estoy de acuerdo con que tengamos que llevar lo mismo.
―No nos estamos llevando lo mismo, morena. De hecho, es de las pocas veces que no llevamos ninguna prenda igual....
Me refiero a eso de llevar el mismo tipo de ropa: dos pantalones, dos sujetadores, calcetines, escote lo justo... las demás personas del mundo, a las que solemos llamar normales, suelen poner en su propia maleta lo que les viene en gana.
―Ya, y esas personas normales, siempre llegan a su destino y dicen: "Oh no, demasiado fina para estas horas" o, "ojalá me hubiese puesto más elegante...". Llevamos lo básico para poder elegir y sin pasarnos con el peso de la maleta.
―Ya, uno de los tantos resultados de comprar billetes por internet sin derecho a devolución y a bajo costo. Si no podemos siquiera llevar un bolso de mano, ¿dónde se supone que meto el bolso?
―¿Dentro del otro bolso?
―Era retórico, rubia...
―Bueno, a ver que ya queda menos... ¿Botines, sandalias y salones, con tacones todos ellos?
―¡Sí, señor!
―Muy graciosa, morena... ¿Toallitas, pañuelos de papel y monedero con veinte euros en monedas de un euro?
―Sí, y definitivamente, eres peor que la abuela.
―Me lo agradecerás cuando quieras comprar un café de estos asesinos y la máquina solo acepte monedas de un euro; entonces ríete del billete de veinte que sueles llevar todo doblado en el fondo de la cartera y aplastado por la canderilla que luego juntando todo no llega ni para un refresco.
―¿Ya hemos terminado, rubia?
―No, queda algo más... ¿sabes cuándo tienes la sensación de que se te olvida algo?
―¿Tu sentido común, por ejemplo?
―Estás que te sales hoy morena...
―Gracias, es parte de mi encanto personal…
―¡Cómo se me había pasado! Que si nos dejamos lo más importante… ¿Gafas de sol mega XXL, gorro a juego y gabardina?
―Me niego a ponerme un gorro chungo. No me he tirado dos horas peinándome para eso. Mi melena negra al viento, ¡y punto!
―Sabes que es necesario, morena. No vamos precisamente invitadas…
―Me da igual. Me pongo las gafas, la ropa a juego, la gabardina efecto horno, lo que sea, pero mi pelo, no lo tapo.
―Vale, no lo vamos a discutir ahora que no tenemos tiempo.
―¿Nerviosa rubia?
―No… ¿y tú?
―Qué va… ¡a esas las pillo yo sí o sí!
―Ahí viene…
―”Oh, qué pena, tengo que terminar un artículo para el periódico, lo siento, princesa de fresa”. De fresa… ¡bésame el culo! Esa se creía que no me iba a enterar yo. ¡A Sitges! ¿En serio?
―Sabes que conmigo no tienes que disimular, morena. No te jode que vaya allí sino…
―No te atrevas a mentar a esa… esa…
―¡Eh, cuidadín con lo que dices, Jean!
―Claro que sí, tú la defiendes, ¿no? “No te metas con mi best friend morena…” Pues te recuerdo, Cleo, que ella te dejó tan tirada cuánto la rubia a mí. ¡¡Y para irse juntas las dos!!
―Terminar un novela dice… ¡y mi tinte caducado me lo como!
―Bueno, tranquila hermana. Vámonos ya de una vez que no llegamos al final. Y no olvides: solo vamos para observar. Nada más.
―¿No nos pillarán verdad? Lo mismo se pensarán que las estamos acosando o algo así…
―¿Acosadoras? ¿Nosotras? Pero si somos lo más dulce del mundo. Mira, una vez allí ya veremos cómo va todo. ¿Recuerdas lo que hemos ensayado?
―Cada sílaba, morena.
―¿Si preguntan qué hacemos allí?
―Acudiendo al Festival de cine más importante de Europa, por supuesto.
―¿Y si preguntan por qué no dijimos que íbamos a ir?
―Ah, solo fue un plan de última hora de hermanas inseparables.
―¿Y si dicen que para qué las gafas de sol y andar encaramadas detrás de los arbustos y farolas como las gemelas Colombo?
―Pues porque no gusta pasar inadvertidas. La fama ya empieza a pasarnos factura.
―Pues lo tenemos todo.
―¿Morena?
―Dime, rubia…
―Ellas… no… no puedo preguntarlo…
―No pasa nada, hermana, te entiendo. Y no, estas no se hacen amigas forever porque lo digo yo.
―No me gusta volar.
―Máscate el chicle el biodramina. Se te pasará en seguida.
―¡Joer, morena, pero si los has comprado con cafeína!
―Ai, Dios, será un viaje muuuuy largo...

Continuará... si es que no se pierden por el camino...




Y el lunes seguimos con From My Blond Mind...

***

8 comentarios:

  1. He tenido un deja vu!!! :-)

    Pero incluso con deja vu me he reido, jatetú :-)

    Los tios, para un viaje de un día, hubieramos embutido en una mochila una camiseta y unos tejanos, unos boxer y unos calcetines, y arreando. Pero claro, las gemelas son dos, y una de ellas es rubia, y les gusta discutir más que a un tonto un lápiz...

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    1. Es que los tíos no tenéis claro aún que, dos cosas: primera, nunca puedes estar seguro de lo que te encontrarás en un viaje (mi odio hacia el tipo del tiempo, luego) y dos, las nenas, somos, y eso es un hecho, complicadas, no por ello inaccesibles, pero sí que, donde caben un calcetín, mejor, por si las dudas, que sean dos...:D

      besosss

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  2. Gemelas fabulosas muy buen viaje!!!!!!! Y quiero una súper crónica de los pasos de mi Karol y la Irenuchi, que seguro se portaron mu'mal!!!!

    Besazo

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    1. Buah, buah, buah... no sabes tú bien la que han liado... o sí, sí que lo sabes... es que, a estas, ni yo las contralo, oiga... ajajaj:D

      besoss mi Connie ^^

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  3. Salvando las distancias, hasta para un puente normal, sin tantos planes, acabo teniendo las mismas discusiones... va a tener razón una amiga mía y es mejor viajar solo y encontrarse en destino jajaja

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    1. Jajajaajja... eso, eso... pero, y no lo puedo evitar, mejor en dos que uno solo, que siempre en buena compañía, los piscolabis de los aviones, saben mejor...:D

      besosss

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  4. Estas gemelas al final nos volverán locas!!!!!!!!!!!!!!! jejejejej Ah, no, pero si ya lo estamos, será que fuimos nosotras las que las enloquecimos? A saber :DDD
    Besos mi amor, me rio cada vez que lo leo y seguro volveré a leerlo :D Te quiero mi compañera de viaje, hasta el infinito y.......

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  5. Contigo viajo hasta debajo de una piedra, nenaaaa^^
    Si es que, si no nos reímos de nosotras mismas, qué nos queda?

    Eres la mejor, y eso, te lo repito y no me canso de decirlo:D

    Besossss

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